Ya he terminado la 2ª temporada de Minhunter, una de las series del momento. Vamos al lío:
Trama: Los agentes Holden y Tench están ya plenamente considerados dentro del FBI y su sección dentro del cuerpo tiene cada vez más prestigio. Ahora compaginan sus trabajos de campo (entrevistas a asesinos en serie) con casos en los que actúan como investigadores. Además de eso debe lidiar con sus propios y diversos problemas personales…
Uno de los nuevos casos se centra en la desaparición de varios niños en el estado de Alabama, un lugar marcado por el racismo latente y en el que los agentes tendrán que enfrentarse a mil y un problemas durante su investigación.
Valoración:
Mindhunter pasa por ser una de las producciones más “prometedoras” del panorama actual. Se trata de un “Thriller” con bastantes pretensiones que sigue la estela de los filmes de asesinatos en serie, etc. Un género que ha “parido” un buen número de series en los últimos tiempos.
Lo que destaca de esta serie es que intenta dar un toque más intimista, mostrando la “cara B” de los policías que persiguen a asesinos despiadados y aterradores. Es decir, estamos ante una visión cercana de los agentes en la que sus vivencias personales y sus circunstancias importan más que los criminales y sus atrocidades.
La serie mantiene en todo momento un tono pausado y hasta cierto punto lúgubre. Los protagonistas se podrían definir como “perdedores” atrapados por su trabajo que van cayendo poco a poco en las miserias de sus casos. De entre los 3 destaca un Holden que aporta el carisma (aunque su personaje nos recuerde a otros polis “raritos” de películas y series del ramo), siendo sus dos compañeros unos dignos acompañantes de andanzas.
Las tramas se bifurcan en dos caminos claramente establecidos: las vidas personales de los protas y las tramas policiacas, aportando ambas diferentes matices. En algunos momentos me sobra de las primeras (sobre todo la trama del hijo de, que me resulta algo increíble y llega a cansar), pero están bastante equilibradas.
Con Minhunter me pasa una cosa: me parece que tiene todo para ser una gran serie pero le falta “punch” para llegar a ser top. Holden, el protagonista, no llega a esa genialidad de otros grandes detectives (tipo en True Detective) y en algunos momentos resulta anodino, perdiendo protagonismo frente a sus compañeros. La serie toca muchos palos (feminismo/machismo, política, etc.) pero no llega a apuntalar ninguna de forma espectacular. Mantiene el tono y la calidad pero le falta algún episodio de esos que quiten el hipo para llegar a emocionar.
Por comparar con alguna producción al uso, como pueda ser True Detective yo diría que le faltan esos toques de genialidad que marcan la diferencia y convierten a un buen producto en una obra maestra. Todo está quizás demasiado controlado, es demasiado pulcro y falta algo que se salga de la norma para poder dar un salto de calidad.
Con todo, estamos ante uno de los títulos del momento. Una buena dosis de género policiaco con sabor USA, buenos actores y tramas que enganchan. Veremos si en la siguiente temporada la serie rompe del todo en algo mucho más grande.
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