Es complicado encontrar series diferentes en el panorama actual. Hablo de series que se salgan de la norma o que ofrezcan algo diferente a lo que ya ofrecen decenas de productos que inundan el mercado. Por eso es agradable ver que aún existen reductos de originalidad y calidad como es el caso de Noche y día.
Noche y día cuenta las vivencias de un grupo de médicos forenses y policías en su trabajo diario. Se trata de un equipo bastante heterogéneo de personas cuyas vidas se entrelazan en el día a día y que tienen inquietudes bastante mundanas. Sin embargo, tras la fachada de la "normalidad" se esconden secretos y mentiras, aspectos que van tiñendo de negro la realidad de todos ellos.
Las cosas empeorarán cuando un asesino en serie entre en escena. Sus crímenes removerán aún más los cimientos de las relaciones personales de los protagonistas y les obligará sacar lo mejor (y peor) de todos ellos y ellas.
Valoración:
Entre tanta serie de policías al uso es complicado dar con algo que llame realmente la atención. Noche y día destaca de entre tanta copia por varios aspectos:
Los personajes y relaciones sociales. Pocas veces una serie de TV ha tratado con tanto realismo y acierto a sus personajes protagonistas. En este sentido asistimos a una recreación de personalidades complejas y con muchas dobleces, personas "normales" (como todos nosotros y nosotras) que tras su imagen de perfección y éxito mantienen dobles (y triples) vidas.
Se habla mucho y bien de la falsedad de las convenciones sociales y lo frágil de la imagen que proyectamos todos y todas al exterior (el juego social de las apariencias). Todo ello retratado sin estridencias y con una credibilidad pasmosa, dando una imagen extremadamente cruda del tipo de sociedad que estamos creando en este mundo llamado "civilizado".
El escenario que presenta la serie es bastante lúgubre y deprimente, aunque es capaz de huir del tremendismo y sensacionalismo para tratar nuestras miserias humanas con mucha naturalidad. Todos los protagonistas arrastran traumas y lacras varias, aunque la serie huye en todo momento de apelar a la lágrima fácil y barata. Todo lo contrario.
El trabajo actoral es espectacular. Los actores y actrices están de 10 y son capaces de atraer la mirada desde el minuto 1. Chapeau.
Las tramas policíacas quedan siempre en un segundo plano, siendo una excusa para poner en escena a los personajes protagonistas. La historia del asesino en serie bastante tópica y sirve de hilo conductor para que podamos asomarnos a las vidas del equipo de investigación, aunque el propio asesino sea uno "más" de los personajes cuya vida es expuesta (y puede que no sea el peor de todos y todas).
Estamos ante una gran serie. Un producto de esos "pequeñitos" pero que deja un sabor de boca muy bueno. Una muestra de que se pueden hacer series "distintas" con los mismos ingredientes de siempre pero cuidando aspectos concretos que marcan la diferencia. Muy buen producto.
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