Jessicca Jones es uno de los personajes más emblemáticos de los Comics Marvel de la última década. Se trata de una ex-heroína metida a investigadora privada que se busca la vida como puede, huyendo de un pasado del que no se siente especialmente orgullosa...
El encanto de los tebeos de este personaje (Alias, ese era el título) era, además de la protagonista, la mezcla entre género negro y cómic de superhéroes, en el que se desmitificaba la leyenda de estos personajes -sin hacer tampoco demasiada sangre- y se buscaban nuevos caminos dentro de ese mundillo. El resultado era notable, dejando en el recuerdo uno de los mejores cómics de los últimos tiempos.
En la serie de TV se pierde una parte de la esencia del papel impreso, ya que Jessica Jones no aparece, al menos en principio, como una ex heroína trajeada y arrepentida. Por el contrario, se nos presenta a Jessica como una suerte de Lisbeth Salander sin ese referente tan atractivo. En ese sentido, se elimina parte del encanto de los tebeos, lo que es una verdadera pena.
Por lo demás, la serie pinta bastante bien. El personaje tiene mucho potencial y los primeros episodios abren un panorama más que interesante. Veremos cómo evoluciona la cosa...
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